La salud bucodental no es solo una cuestión de estética o bienestar general, también puede ser determinante en el rendimiento físico de los deportistas. Diversos estudios recientes han demostrado que infecciones como las caries no tratadas pueden afectar negativamente el estado físico, provocando inflamaciones musculares que disminuyen la capacidad de entrenamiento y competencia.
La relación entre una boca sana y el rendimiento deportivo se ha vuelto cada vez más evidente. Las bacterias que se alojan en la cavidad bucal pueden pasar al torrente sanguíneo y generar inflamaciones que repercuten directamente en músculos y articulaciones. Esto no solo genera molestias físicas, sino que aumenta el riesgo de lesiones que podrían alejar al deportista de las canchas por un buen tiempo.
Especialistas en odontología deportiva recomiendan incluir revisiones dentales periódicas dentro del plan de salud integral de todo atleta, tanto amateur como profesional. Además de prevenir caries o enfermedades en las encías, estas visitas permiten detectar a tiempo problemas que podrían complicarse y afectar el rendimiento general.
Mantener una higiene bucal adecuada —como cepillado diario, uso de hilo dental y evitar excesos de azúcares— es tan importante como hacer ejercicio o llevar una buena alimentación. La clave está en entender que el rendimiento físico no solo se cuida en los entrenamientos, también empieza por una sonrisa saludable.

Autor: Santiago Matias Flores Acebedo
Editor: Daniel Castillo Haro